BRIAN ORSER: “MIS EXPERIENCIAS OLÍMPICAS, EN SARAJEVO Y EN MI PAÍS, FUERON MUY ESPECIALES”

Brian Orser puede considerarse un hombre afortunado: llegó a lo más alto de su carrera deportiva, disputó una Olimpiada histórica y una segunda en casa y además revivió el sueño olímpico de otras formas: como entrenador, periodista, comentarista y como espectador. El canadiense, hoy en día entrenador de los mejores patinadores actuales, como el español Javier Fernández o el vigente campeón olímpico Yuzuru Hanyu nos comentó sus experiencias olímpicas en una entrevista exclusiva: “He sido medallista como patinador y ahora soy entrenador; son dos cosas diferentes. Mi experiencia como atleta olímpico y campeón mundial realmente me ayuda para trabajar de entrenador con estos chicos porque tengo una perspectiva sobre cómo es siendo patinador, no tanto con la competición sino que también con el entrenamiento, que es donde se debe hacer la mayoría del trabajo, así que lo tomo desde mi experiencia, que ayuda mucho”. Orser califica de “apasionante” entrenar a dos grandes campeones como son el madrileño y el japonés: “Me considero muy afortunado por tener como entrenador a dos de los mejores atletas del mundo”. Los define como “muy diferentes,  con personalidades totalmente distintas, ambos con mucho talento. Mi trabajo es hacer todo lo que sé por los dos. Les trato de manera individual. Se crea un ambiente interesante porque ambos se quieren  y respetan mutuamente, lo que facilita mucho mi trabajo”.

Orser recuerda sus dos experiencias olímpicas como patinador de manera diferente: “Siempre que se tiene la oportunidad de competir en unos Juegos es algo muy especial y es igualmente algo único la ciudad que los alberga. Sarajevo fue muy especial porque cambiaron muchas cosas después. Calgary también porque es una oportunidad única que se da solo una vez en la vida competir en unos Juegos Olímpicos en casa y ser además uno de los favoritos. También el poder ser abanderado, que fue algo increíble”.

Brian Orser reconoce que “en Calgary tuve una mayor presión. En Sarajevo aún era muy joven; yo soñaba con unos JJOO, sueño que se convirtió en realidad allí y fue abrumador y emocionante. A veces es mejor no ser muy consciente de lo que suponen. Más tarde me di cuenta de lo grande que son”.

Orser confiesa: “Disfruté ambos Juegos por igual, por diferentes causas: el primero porque fueron los primeros y los segundos porque eran en mi país y era el favorito, lo que les convertía en algo tremendamente emocionante.  Cuando fueron en mi propio país tenía que estar realmente preparado, mentalmente, para atacar los Juegos. Fue algo increíblemente especial, pero es por ello que las Olimpiadas son tan estresantes”.

Todos recuerdan el tremendo duelo que protagonizó en su época con otro Brian, en este caso el estadounidense Boitano. Se denominó a dicha rivalidad “la Batalla de los Brian”, aunque Orser lo califica de “invento televisivo para dar un mayor dramatismo a la competición. Es curioso, pero cuando llegan unos JJOO siempre la Prensa se inventa alguna historia. Hay muchos periodistas que sólo cubren los Juegos, así que no conocen la rivalidad real que hay. Nosotros de cierta manera la aceptamos. Dicha rivalidad fue perfecta para nuestro deporte y buena para nosotros en particular; nosotros éramos bastantes populares y la gente nos conocía por “la Batalla de los Brians”…aunque a veces no supieran cuál de los Brian éramos, pero no importaba. También ofrecíamos un buen patinaje, así que estábamos a la altura de la Batalla. Ambos patinábamos bien. Nuestra relación era buena; éramos diferentes, nos respetábamos uno al otro y éramos muy amables el uno con el otro. Yo admiraba su patinaje, lo mismo que él hacía conmigo. Ambos teníamos un buen sentido del humor, trabajamos muy duro y queríamos ganar”.

Orser, que fue el primer patinador en conseguir un triple axel en unos Juegos Olímpicos (“Como atleta siempre estaba intentando realizar cosas nuevas, así que el triple axel era simplemente una de esas cosas. Quería superar un reto y eso es lo que enseño ahora a mis atletas”) confiesa que él permanecía totalmente concentrado durante los Juegos, sin poder disfrutar de la singular vida en la villa olímpica: “Durante los Juegos Olímpicos estaba muy concentrado. Algunos deportistas van también a disfrutar de unos Juegos y divertirse, mientras que para mí se trataba de un trabajo. Tenía obligaciones y responsabilidades en los JJOO”.

Sin embargo, no dejó de disfrutar a su manera del sueño que había tenido desde niño, cuando contemplaba los Juegos de Invierno frente al televisor, aislado del juego con sus hermanos: “Es especial estar en unos Juegos Olímpicos con tantos atletas de tantos países y deportes, tener respeto mutuo, no solo con patinadores, sino con otros grandes atletas, como Alberto Tomba y compartir el mismo espacio con ellos era algo inspirador. Me encanta haber tenido la oportunidad de poder haber sido inspirado por algunos de estos grandes deportistas“.