Parejas olímpicas

LIUDMILA PAJOMOVA Y ALEXANDR GORSHKOV: LOS PRIMEROS CAMPEONES OLÍMPICOS DE DANZA Y SU HISTORIA HUMANA

No es un dato muy conocido que la modalidad de danza dentro del patinaje artístico no entró en el calendario olímpico hasta hace relativamente poco: lo hizo en los Juegos de Innsbruck de 1976, a pesar de que el patinaje artístico es uno de los deportes con más solera dentro de los Juegos Olímpicos. La pareja que tuvo el honor de entrar en los anales como la primera campeona olímpica de danza fue la soviética compuesta por Liudmila Pajomova y Alexandr Gorshkov. Su historia personal es digna de darse a conocer.

Ambos se iniciaron en el patinaje a los seis años, pero pasaron muchas cosas hasta que se conocieran y, por tanto, unieran sus destinos. Liudmila entró en su deporte por casualidad. Su padre, un aviador del ejército, soñaba con que su hija se convirtiera en paracaidista. Su madre, yendo un día en el Metro, entabló conversación casual con Viktor Rizhkin, por entonces entrenador de la selección soviética. Esa conversación, que resultaría vital, acabó haciendo que una jovencísima Liudmila probara en este -para ella- nuevo deporte. Rizhkin se convirtió en su primera pareja de danza, pese a la diferencia de nueve años que les separaba. Aun así, ganaron tres campeonatos soviéticos, pero la diferencia de carácter entre ellos hizo que se separaran en 1966. Tras Rizhkin Igor Grishkov se convierte en su siguiente pareja. Con él consiguió otro par de de campeonatos nacionales, pero Grishkov decide retirarse. Para cuando esto ocurrió, Liudmila ya había adquirido la suficiente experiencia. Y es entonces cuando aparece en su vida Alexadr Gorshkov, prácticamente sin experiencia ni bagaje personal, pero la fuerte personalidad de Liudmila sería la que al final llevaría a la pareja a los éxitos que estaban a punto de conseguir. Por entonces dominaban dos escuelas en el mundo de la danza: la inglesa, más emocional, y la soviética. Aparece entonces la posibilidad de que la danza se integre en el calendario olímpico. Así, en los Juegos disputados en 1968 se presenta como deporte de demostración. Sería la prueba de fuego para ver si entraba por méritos propios en el programa oficial. Mientras, la nueva pareja va consiguiendo éxitos y, además de ello, Liudmila y Alexadr se enamoran. Gorshkov le propone en matrimonio, pero Pajomova le responde que sólo se casarán si logran proclamarse campeones del mundo. Lo hacen, la primera de sus siete ocasiones en 1970. Ese mismo año oficializarían su matrimonio.

La pareja fue ganando oros en los campeonatos mundiales año tras año, creando en 1974 el llamado “Tango Romántica”, que la federación internacional acabaría adoptando como danza obligatoria.

En pleno culmen de su carrera Alexandr se siente mal. Durante el Europeo de 1975 (que ganarían) empiezan los dolores que acaban con una operación en el pulmón. Se da la circunstancia de que su entrenadora donaría sangre para su operación. Llegan ese mismo año a viajar a Colorado para participar en el Mundial, pero en un entrenamiento Gorshkov siente que no puede respirar y han de darle oxígeno. En la Unión Soviética llegó a afirmarse que había muerto en el viaje hacia Estados Unidos, de tal forma que el máximo responsable político del deporte soviético le llama para confirmar si está vivo. En ese momento se acabó la temporada para ellos, pero no todos esperaban que la siguiente temporada, con el prometedor aliciente de la incorporación de la modalidad de danza a los Juegos Olímpicos, resultaría tan positiva para la pareja.

En efecto, tras superar delicados momentos de salud, no solo se recupera Gorshkov para seguir su carrera, sino que consigue el primer oro olímpico de danza junto a Pajomova. Ese mismo año, se retiran. Se habían convertido en leyenda y habían entrado en la historia. En su país se escribían libros sobre ellos, no paraban de publicar artículos sobre ellos, se hicieron películas…

Tras la retirada, Pajomova se convierte en entrenadora, profesión a la que se entrega en cuerpo y alma. Sus pupilos se convirtieron en campeones de Europa, campeones del mundo junior y otros títulos. Liudmila no salía de las pista de entrenamiento ni siquiera cuando se le detectó una grave enfermedad: leucemia. Incluso en pésimas condiciones de salud, seguía entrenando. Murió en 1986 a los 39 años. Su sueño era haber seguido dejando huella en su deporte. Hoy en día un planeta, el 3231 Mila, descubierto por la astrónoma soviética Liudmiala Zhuravliova en 1972, lleva su nombre.

Por su parte, Gorshkov fue director del comité técnico de danza de la federación internacional y, en 2010, fue nombrado presidente de la poderosa federación rusa de patinaje artístico. También preside una fundación benéfica dedicada a las artes y al deporte que lleva el nombre de Pajomova.

Foto de Allsport Hulton/ Getty Images

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