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LOS HUBER: LA SAGA DE HERMANOS ITALIANOS QUE DOMINÓ LOS JUEGOS OLÍMPICOS DE INVIERNO

Emil y Emma Huber pueden estar más que satisfechos. Son los patriarcas de una de las familias más laureadas en Juegos Olímpicos y eso que ellos mismos nunca lo fueron. Sí es cierto que Emil, el padre, fue luger amateur, pero su profesión era la de apicultor. Tuvieron dos hijas y cinco hijos, cuatro de ellos olímpicos y juntando todos sus logros completaron cinco medallas en Juegos de invierno en dos modalidades: luge y bobsleigh. Desentrañemos las carreras y éxitos, a veces entrelazadas, de los exitosos hermanos Huber, italianos nacidos en Brunico.

Norbert es el mayor, nacido en 1964. Se dedicó por entero al luge compitiendo con éxito tanto en la categoría individual como en la de dobles, siendo ésta donde conseguiría sus mejores resultados. Participó en cuatro ediciones olímpicas. En la primera, con 19 años, en Sarajevo 84. Acabó sexto en dobles y noveno en la competición individual. En esa edición olímpica tuvo verdadera mala suerte, pues un error en la competición de dobles hizo que tanto él como su compañero se cayeran y bajaran del segundo puesto que ocupaban hasta el noveno final. En la siguiente cita olímpica no pudo competir por enfermedad, pero sí pudo hacerlo en la de Albertville 92, consiguiendo su primera medalla olímpica, el bronce en dobles. En Lillehammer subiría un escalón del podio al hacerse con la plata, siempre con su compañero Hansjörg Raffl. Finalmente, en los Juegos de Nagano 98 sólo compitió en individual, acabando décimo. Durante su carrera conseguiría doce medallas mundiales y catorce europeas, además de la clasificación final de la Copa del Mundo en dos temporadas tanto en singles como en dobles, siendo el primer luger que lo hiciera. 36 son las victorias de primer nivel que lograría en su carrera, lo que lo convierte en uno de los deportistas italianos más exitosos en las disciplinas invernales.

Günther Huber tras conseguir el oro en Nagano en Bob a 2. Foto del CONI

Lo que no hemos mencionado es que en los Juegos Olímpicos de Lillehammer sólo pudo superarle otra pareja italiana: la compuesta por Kurt Brugger…y su hermano Wilfried Huber. Hablemos de Wilfried, el cuarto hermano, pues nació en 1970. Con una carrera muy similar a la del mencionado Norbert, ya que compitió en luge tanto de forma individual como en dobles, superó a su hermano mayor en valor de la medalla olímpica conquistada (el oro de Lillehammer en dobles), pero el total de sus victorias y podios internacionales es inferior al de Norbert. 20 años duró su carrera en la que participó en seis Juegos Olímpicos (todos desde Calgary 88 hasta Turín 2006). Podría haber batido el récord de ser el primer deportista en participar en siete Juegos invernales si le hubieran convocado para participar en los de Vancouver 2010, pero el seleccionador azzurro no lo hizo finalmente. En el resto de sus participaciones olímpicas Wilfried no alcanzó el podio, siendo sus mejores (después del citado oro) puestos dos quintos.

Podrán preguntarse ¿y por qué los hermanos Norbert y Wilfried no participaban juntos en la competición de dobles? La respuesta es sencilla: porque sus físicos son demasiados parecidos por lo que no funcionarían bien morfológicamente (en el doble un componente es más largo que el otro).

Wilfried Huber. Foto de la RAI

Turno para otro hermano que tuvo el honor de aportar otra medalla olímpica al exitoso clan Huber: Günther, el segundo, pues nació en 1965. Se inició en el luge, como el resto de sus hermanos, pero se cambió al bobsleigh porque “estaba harto de perder ante mis propios hermanos”. El cambio de especialidad fue todo un acierto, porque en el bob a 2 se ha hecho con dos medallas olímpicas: el oro en Nagano 98 y el bronce en Lillehammer 94. Günther ha totalizado cuatro participaciones olímpicas, las dos primeras junto a Stefano Ticci y las dos últimas con Antonio Tartaglia en cuanto a la modalidad dual, ya que Huber también participó en el Bob a 4 en todas las ocasiones menos en la última. Por las venas de Günther también corría sangre de campeón, pues consiguió el oro olímpico, el Mundial y el de la Copa del Mundo (éste en dos ocasiones).

Y nos queda un hermano, Arnold, el tercero en orden cronológico (nació en 1967). Para su desgracia, no consiguió ninguna medalla en Juegos Olímpicos, aunque sí se proclamó campeón mundial en 1991 en categoría individual, curiosamente, medalla que nunca consiguió su hermano Norbert. Posteriormente se pasó al bobsleigh, siguiendo los pasos de Günther. Arnold sólo sería olímpico en una ocasión: en los Juegos de Lillehammer, la cita olímpica en la que coincidirían los cuatro hermanos y en la que tan buenos resultados obtendrían todos porque Arnold no se colgó la medalla al cuello por un pelo, acabando cuarto.

Una vez retirados, los hermanos han seguido en el mundo del deporte: Arnold forma parte del equipo técnico de la selección italiana de luge, lo mismo que Wilfried. Norbert lleva un hotel familiar en la montaña pero a la vez forma parte del staff técnico del potente luge italiano.

Y si piensan que con la retirada de los cuatro hermanos la saga de los Huber ya ha dado al luge italiano y mundial todo lo que tenía que dar se equivocan, porque ya está llamando a la puerta la jovencísima Annalena Huber, de 18 años, que ya compite en los campeonatos de más alto nivel en la modalidad de dobles de luge. Quién sabe si pronto podrá igualar o incluso superar a los Huber que iniciaron el camino del éxito.

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