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EL SALTO AXEL: EL MÁS DIFÍCIL DEL PATINAJE ARTÍSTICO

Si usted no es un experto en patinaje artístico pero ha visto alguna transmisión televisiva de este deporte se habrá dado cuenta de algo: de entre todos los saltos que existen en el patinaje solo un se realiza hacia delante y es precisamente ese detalle el que lo convierte en el más difícil, al añadir media rotación al partir hacia adelante en su despegue. Se trata del salto axel. Axel viene de un nombre propio, como muchos habrán deducido. Axel Paulsen fue en efecto su creador. Se podría pensar que el tal Paulsen –noruego, para más señas- sería un afamado patinador de artístico pero en realidad fue un campeón de patinaje de velocidad.

Tenemos que remontarnos ni más ni menos que a mediados del siglo XIX para localizar al innovador deportista. Paulsen nació en 1855 en Aker. Su padre inculcó a Axel y a sus hermanos la práctica deportiva en la que tenía que destacar, al tratarse de un país nórdico como Noruega: el patinaje de velocidad sobre hielo. Axel ganó su primera competición de importancia en 1880; se trataba de una carrera de 5.000 metros a nivel nacional que le llevó a competir en el extranjero. Llegó a ganar a más de una docena de los mejores patinadores de velocidad del mundo en Brooklyn, Nueva York, solo por nombrar una de las competiciones de alto nivel en las que participó con éxito. Tanto, como para ser nombrado el “campeón mundial amateur”. Fue estableciendo récords mundiales y lo que es mejor para el patinaje mundial: estableció la ya habitual postura de brazos cruzados en la espalda.

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Pero Axel Paulsen, aunque destacara principalmente en el patinaje de velocidad, también se dedicó al deporte en el que ha dejado su nombre propio para los restos: el patinaje artístico. En esta modalidad, aun siendo un atleta de gran nivel, no alcanzó los éxitos de su pariente más o menos lejana, la variante de velocidad. Aparte de la creación de su salto, Paulsen revolucionó el deporte en el sentido de variar su rumbo y tendencia: si hasta entonces dominaba el llamado “estilo vienés”, más inclinado hacia la parte artística, Paulsen hizo hincapié en el “estilo nórdico”, que daba una mayor importancia a la parte física y a la velocidad. De la mezcla de ambas surgió el “estilo internacional”. Es decir: podríamos decir que Paulsen añadió dificultades atléticas al “baile sobre el hielo” y le sumó características más deportivas, lo que no es poco.

Centrándonos en su célebre salto, el quizá único reconocible al ojo del inexperto, decir que ya ha cumplido la friolera de 134 años. Al ser el más difícil de realizar, lógicamente es el que más puntos da. En una comparativa tenemos que el triple axel proporciona 8.5 puntos, el triple Lutz 6.0, el triple flip 5.3, el triple loop 5.1, el triple salchow 4.4 y el triple toeloop 4.3. Esta lista nos ayuda a comprender y valorar el salto inventado por Paulsen. Así mismo hay que recalcar que a día de hoy nadie ha logrado un cuádruple axel en competición –el único junto al loop que no tiene su variante cuádruple-. De hacerlo, el patinador sumaría la friolera de 15.0 si lo consigue. Otro dato que recalca su dificultad es el hecho de que solo seis mujeres han logrado este salto triple en competición (de las que aún compiten solo la japonesa Mao Asada y la rusa Elizaveta Tuktamysheva lo realizan en competición).

Finalmente, dos curiosidades: el propio Axel Paulsen realizaba su salto con patines de velocidad y se ha comprobado que los patinadores saltan más bajo al realizar la variante triple que la doble de este salto, algo cuanto menos curioso.

 

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