MATT STUTZMAN: MARAVILLÓ EN LONDRES 2012 EN TIRO CON ARCO LANZANDO CON SUS PIES

Matt Stutzman llamó la atención de mucha gente durante los Juegos Paralímpicos de Londres. Este estadounidense no solo se hizo con la medalla de plata en la prueba individual de arco compuesto en el deporte del tiro con arco, sino que las imágenes de su intervención dieron la vuelta al mundo al carecer de brazos. Stutzman lanza con sus pies, además de ayudarse de la mandíbula y el hombro. Parece increíble ver cómo una persona sin brazos puede manejarse tan bien con un deporte en el que las extremidades superiores son fundamentales.

Matt nació sin brazos y fue dado en adopción a los pocos meses de su nacimiento. Los médico aún no se explican el por qué de su condición, afirmando que se trata de un caso entre 350.000 nacimientos. Vivió con su familia adoptiva en una granja y ni sus padres ni sus hermanos le trataron de manera especial. Al contrario, fueron estrictos con él para que no se convirtiera el resto de su vida en una persona dependiente. Sus hermanos han sido fundamentales en su vida, de hecho, fue adoptado porque fueron ellos los que le quisieron y dieron el “sí” definitivo. Entre todos han logrado que Matt sea autosuficiente, hasta el punto de realizar todo sin ayuda, desde comer hasta conducir. Sus hazañas le han hecho ser uno de los protagonistas del célebre film documental “Rising Phoenix”, que narra las vidas y las carreras en Juegos paralímpicos de varios deportistas destacados.

Comenzó en el deporte del tiro con arco de manera casual. Ya casado y con hijos se encontraba en el paro. Su mayor preocupación era poder dar de comer a sus hijos. Para ello cazaba con un rifle, hasta que un día decidió hacerlo con un tiro con arco. Ya cuando contaba 16 años se había comprado uno, pero tuvieron que pasar unos cuantos años para que pasara a usarlo de forma habitual. Así, tenemos que primero Matt usó el tiro con arco de forma recreativa, luego por auténtica necesidad de llevar comida a casa y sólo a partir de 2011 en competiciones deportivas. De nuevo entró en juego la casualidad para adentrarle en el mundo del deporte, pues vio por televisión una competición que se estaba disputando en Las Vegas y decidió entrenar de cara a participar en competiciones él mismo. Al poco batió un récord Guinness lanzando el arco a la mayor distancia alcanzada de la que se tiene constancia, incluso con una persona con brazos: 283 metros. Sólo un año más tarde ya ganó una medalla en Juegos Paralímpicos. Eso sí, medalla bien sudada porque vino de superar varios enfrentamientos en los que se encontró por detrás de sus competidores.

Su vida dio un cambio a partir de entonces. Las imágenes de Londres 2012 mostrándole le convirtieron en una persona reconocible. Siguió participando y lo hizo en los Juegos de Río 2016 y Tokio 2020. En Río acabó en el noveno puesto (que repetiría en Tokio 2020, pese a que preparó incluso más a conciencia llegando a perder 27 kilos) achacando el mal resultado a una flecha en malas condiciones. A todo ello hay que sumar varias varias medallas en Mundiales.

Stutzman puede hacer de todo sin brazos (abandonó pronto el uso de prótesis y su casa no está adaptada): además de lo dicho anteriormente escribe y hasta toca la guitarra. La filosofía de vida en el hogar de su familia era clara: Matt tenía permiso para probar hacer lo que quisiera…siempre que lo hiciera él solo. A pesar de que ha tenido que usar más paciencia que el resto de los mortales para tirar con la maestría en la que lo hace, afirma que lanzar con una pierna le proporciona una gran estabilidad con el arco. Stutzman es una persona cargada de humor, incluso se ríe de sí mismo. También se dedica a dar charlas motivacionales aunque nos atrevemos a decir que el solo verle tirar con el arco supone suficiente inspiración y convicción de que podemos hacer lo que nos propongamos, siguiendo su magistral ejemplo.